viernes, 6 de abril de 2012

Sin dudarlo, nos calzamos la faja.

Llegó la primavera y con ella las ganas de vestirnos de manera más ligera. ¿Pero qué ocurrió durante el invierno? Comimos, comimos y comimos y ahora nada nos queda como lo deseamos. Si tienes una boda, una fiesta, una salida muy deseada o simplemente quieres verte mejor, Puri te aconseja:

Las fajas. Sí, ellas han vuelto, pero de una manera diferente a las antiguas, son más ligeras, más cómodas, más anatómicas e incluso las hay que proclaman que su uso diario reduce algún que otro gramo de grasa. Déjate ayudar y rompe con los prejuicios del mayo del 68 (recuerda, quememos las faja y los sostenes). Actualmente nosotras sabemos que por usar una prenda determinada no se es ni vieja, ni gorda, ni pasada de moda y si esa prenda nos ayuda a que ese vestidito tan mono que compramos con toda la ilusión nos caiga mejor y ciertas lorzas queden repartidas de manera disimulada pues no lo dudamos y nos calzamos la faja .